viernes, 4 de febrero de 2011

EL INFIERNO DE ORFEO

Orfeo era un chico muy aplicado con la lira, al fin y al cabo su madre era nada menos que la musa Calíope (en griego significa hermosa voz) . De tal palo tal astilla, y aunque su padre era un tanto brutito, el hijo se convirtió en uno de los poetas y músicos más famosos de Tracia.
Todas las compañeras de Calíope, es decir las musas, mimaron al niño y el propio Apolo le regaló una maravillosa lira.
Pero Orfeo no solo era un diletante del arte, también era un pelín aventurero y se embarcó con los argonautas rumbo a la Cólquide en pos del Vellocino de Oro. Parece ser que nuestro hombre, ayudó con su música a muchos de los esfuerzos del resto de la tripulación.

El matrimonio con la bella Eurídice no fue una aventura tan romántica como Gluck nos ha descrito en su maravillosa ópera "Orfeo y Eurídice". La ninfa, hija de Apolo, era un tanto casquivana y andaba sorbiendo los vientos por el pastor Aristeo.
El compositor francés Offenbach fue más cínico con esta leyenda.

"La mujer cuyo corazón sueña
no puede disfrutar del sueño;
cada día se levanta con el sol.
Al alba, las flores más bellas son bordadas.
Pero esas flores ¿para quien son?
¿A mí me lo preguntais?¿A mí, de verdad?
¿Para quién? Ah, ah, ah
No digais nada a mi marido,
pues son para el pastor más hermoso
que vive aquí"

Pero el tal Aristeo lo único que quería de Eurídice era llevársela al huerto sin más y cuando la bella ninfa trató de huir de su sátiro admirador pisó una serpiente y murió de la mordedura.

Según Offenbach Aristeo es el disfraz que Plutón, príncipe del Tártaro, ha adoptado para seducir a Eurídice y como tal se lleva a la ninfa a sus dominios del Infierno. Este hecho da lugar a un conflicto en el Olimpo donde los dioses viven en un limbo despreocupado. Todos duermen aburridos hasta que irrumpe en la divina morada Mercurio, el mensajero.
Este anuncia al cónclave divino que Plutón ha vuelto al Tártaro acompañado de una joven y linda muchachita que le fue arrebatada a su legítimo marido
Júpiter manda inmediatamente que Plutón se persone ante él.
- ¡Has abusado de tu poder, enviando a la muerte a una mujer, para raptarla!- le grita Júpiter
- ¡Eso no es verdad!- se defiende Plutón.
El resto de los dioses comienzan a murmurar entre ellos.
- ¡Silencio!, ¡cuando yo hablo todos se callan!- ordena Júpiter enfurecido y dirigiéndose a Plutón- Y tú no te justifiques con una mentira, lo sé todo, como dios supremo que soy.

He aquí la suntuosa e inolvidable escena del famosísimo Can Can.

Orfeo era un hombre de recursos y dando pruebas de bravura y con el beneplácito de Júpiter descendió al Tártaro con el arma de su lira. Con ella encantó al barquero Caronte, un viejo mal encarado y siniestro. Al joven no se le erizó el cabello cuando oyó los ladridos de Cerbero, que con solo una caricita comenzó a lamerle la mano a Orfeo y le hizo mil carantoñas.
Se cuenta que las torturas de los condenados se suspendieron mientras el lirista atacaba un minuetto.
El mismo Hades se conmovió y como gran escepción, permitió que Eurídice abandonara aquel siniestro lugar, con la condición de que no volvieran la vista atrás. Pero los humanos somos un juguete para los dioses y Orfeo inquieto por ver si Eurídice le seguía dobló su cabeza y....Eurídice se perdió para siempre.

Esta es el maravilloso pasaje musical de Gluck para la ópera "Orfeo y Euridice", es la Danza de los Espíritus. Una música para soñar.

Tras la definitiva pérdida de Eurídice el músico y poeta tuvo un destino trágico. Orfeo no dió los honores debidos a Dionisio, cuando éste invadió la Tracia. Ofendido por tal ultraje, el invasor hizo que le ataqcasen las Ménades de Deyo, quienes le desmembraron y arrojaron su cabeza al río Hebro. Sin embargo aquella cabeza siguió cantando hasta que llegó al mar. Desde allí su espíritu siguió libre hasta la isla de Lesbos.

8 comentarios:

  1. Y luego dicen del melodrama de Douglas Sirk...Intensas historias de amor-odio y sinietras conspiraciones... ¡ de todo ! Lo mejor es que inspiraron lo mejor de las operas...
    Estas entradas tuyas me dan un ganas tremendas de ponerme a leer mitologia y ya no saco tiempo para nada...Al menos estos " bocaditos tan sabrosos" me dan una idea..:-))

    Un abrazo.

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  2. Excelente ese toque socarrón que impregna tu entrada. Excelente y casi impúdico.

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  3. En el cómic de Sandman, si no recuerdo mal, Gaiman convierte a Morfeo en su padre, y cuando le da el descanso eterno (por petición del hijo... que ya era sólo una cabeza parlante (protegida por un tío con metralleta (estas cosas de los tebeos)) ... propicia que las Erinias vayan a por él.
    Un saludito.

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  4. En la mitología está todo dicho. Mañana pongo una entrada en el fotolog dedicada a las compañeras de Calíope.

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  5. Sí Abril, esto es más que un melodrama. Bueno, yo intento adornar la Mitología un poquito, en atención a mis lectores-
    Gracias Abril, por venir a este rinconcito
    Un abrazote.

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  6. Ja, ja, Raul, el tema lo pedía ¿no crees?
    Un abrazote.

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  7. Como mi hijo es un fan de Gaiman tiene todos los tebeos de Sandman en su comicteca. Hace tiempo los leí todos y sí, recuerdo lo que apuntas.
    Un abrazote.

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  8. Ya ví tu entrada Alfonso. ¡Cojonuda!
    Un abrazote.

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